viernes, 6 de octubre de 2006

Hoy te amo.

Tuve miedo a la inmensa soledad dorada
que colgó tu silencio sobre mi puerta
y continué aún sin mapa o brújula
por el camino inseguro del abandono,
del absurdo espacio en donde alerta
me esperaba el fragor de tu dulzura.
Hoy te amo otra vez, de nuevo
(no sé si dejé de hacerlo en otro tiempo)
El temor se me escapa de los labios
y tu beso interrumpe el mea culpa.

1 comentario:

Anónimo dijo...

COMO ME GUSTAN TUS POESIAS; Y SOBRE TODO ESTA ULTIMA, YO