domingo, 22 de abril de 2007

Julio

A Julio López


¿Qué pasó por tu mente en el último momento
de tu vida
o anoche, si ésta aún existe?
¿Crees que el dinosaurio de la tiranía
avasalla el país entero?
¿Que como vos, otros treinta mil van a seguirte?
¿Que no bastó con aquella sangre derramada?
¿Volvió a recorrer tu cuerpo la corriente?
¿Te hundieron en el Río de la Plata?
¿Apretaste las manos por la furia
contra los asesinos que reinciden,
que se ocultaron tras de la obediencia debida,
que criaron a los hijos de los mártires,
que organizaron marchas como víctimas,
que atentaron contra la democracia,
que secuestraron como bestias impunes,
que te tienen, Julio?
¿O te han matado?


Porque yo tengo un grito amplio
que te busca y que no se resigna,
por las diagonales y los bulevares,
por los sueños y las vigilias.
Soy vos, desde hace tanto...
y estoy desaparecida.