viernes, 9 de agosto de 2013

Tuya

¿Verán el resto, el decir, los otros,
el magnetismo voraz con que persigo
tu perfume por las calles acromáticas,
el brillo encendido que generas
sobre todo el universo si me miras,
y la transformación de mi humor
que ocasionas al acercarte?

¿Serán conscientes de que mi historia
se dividió al encontrarte de tal manera
que no hubo después evento más significativo
que tu ropa en el piso de mi pieza
y tu ser enredándose en mis sábanas? 

Si, todos pueden ver que ando
sonriendo injustificadamente,
bendiciendo cada día de tu vida
que me llena de oxigeno el cuerpo,
y que al saberte mío camino
sin tocar con los pies el suelo.