martes, 6 de enero de 2009

Ajeno.

Como si fuera fácil te despido
abrazándome a tus palabras
con la desesperación de un náufrago
y te dejo volver a tu rutina.


Entonces te recorto de las fotos familiares,
como si eso transformara la verdad en mentira,
como si eso te hiciera mío,
y muerdo los celos que me atormentan
cuando a la noche te pienso,
desde la cercanía de mi improvisada distancia,
creyéndome que el espacio vacío en mi cama es tuyo.


Como si fuera fácil te reencuentro
y te arranco, con una guerrilla de besos,
el pasado que justifica
que mi nombre siempre permanezca en las sombras…


Y creo que sólo yo estoy a tu lado,
como si eso te borrara la memoria,
como si no me doliera…
como si me fuese fácil.