sábado, 26 de abril de 2008

Cuándo


¿En qué momento me volví transparente?
Tal vez cuando lo desee tan profundo
que quise prescindir de mi envase.
¿En qué momento me volví cobarde?
Tal vez cuando el fantasma vino y perverso
golpeó mi puerta buscando reincidencia;
o cuando mi amigo echó alas
y voló detrás de sus hermanos,
olvidándose que lo adoraba
como al sabio que contiene mis preguntas.
Quizás cuando me volví fanática
y amé mi vocación más que mis libros,
o cuando el espejo me mostró sola,
muy sola aunque rodeada de arlequines complacientes,
que me sonreían por simple rutina
como si fuese un ritual o un trabajo.
No amo sino lo que muy dentro
sé que me dejó el alma sin rescate.