sábado, 26 de abril de 2008

Cuándo


¿En qué momento me volví transparente?
Tal vez cuando lo desee tan profundo
que quise prescindir de mi envase.
¿En qué momento me volví cobarde?
Tal vez cuando el fantasma vino y perverso
golpeó mi puerta buscando reincidencia;
o cuando mi amigo echó alas
y voló detrás de sus hermanos,
olvidándose que lo adoraba
como al sabio que contiene mis preguntas.
Quizás cuando me volví fanática
y amé mi vocación más que mis libros,
o cuando el espejo me mostró sola,
muy sola aunque rodeada de arlequines complacientes,
que me sonreían por simple rutina
como si fuese un ritual o un trabajo.
No amo sino lo que muy dentro
sé que me dejó el alma sin rescate.

viernes, 11 de abril de 2008

Olvidé


Ya puedes entrar,
depositar tu voz en cualquier lado,
acercar tu imagen a un centímetro
sin temor a que me encienda,
a que te abrace desprotegida,
a que te diga te quiero,
no me olvides,
guarda mis poemas en tus sueños,
llevame a cualquier lugar del mundo,
tenme como a todo lo que es tuyo,
no me dejes sola,
no te vayas lejos.

Ahora puedes entrar y estar tranquilo,
no escondo el mínimo resentimiento,
detente si quieres en mi vida
(como lo hiciste una vez,
como nunca más lo has hecho).
Puedes poseer mi corazón callado
y huir como un ladrón si lo deseas,
ya no hay herida que sangre,
el mundo volvió al eje en el que estaba.


Como un espejismo, de nuevo,
puedes entrar y estar seguro.
Hoy te quiero mucho menos.