lunes, 3 de marzo de 2008

Desde la selva


A Ingrid Betancourt


Quién sabe si habrá
un mañana de palomas blancas,
una verdadera libertad reposada
que hoy es mezquina e ilusoria
para los muertos que habitan la selva;


quién sabe si habrá un último abrazo
o un color distinto al que tienen las cosas,
si habrá una cálida cama tendida,
un recuentro conmigo misma.


Quién sabe si este cuerpo
que me retiene débil
me dejará escapar hacia otro rumbo,
si soportará un día más de tortura,
de ausencias como garrotes
golpeándome la nuca
en este juego perverso de poderes,
donde soy un peón acobardado.


Quién sabe si yo quiero
un día más de vida…

lunes, 25 de febrero de 2008

Sucedió

Acaecerá,
sucederá como un hecho de la naturaleza,
existirá como la energia,
dolerá como el fuego,
se elevará como un tsunami
ante mis ojos de niña asustada,
se enderezará imponente
y me dejará extinta
(o lo intentará al menos)
En algun lugar ha nacido
y adquirió forma
tu olvido.

domingo, 10 de febrero de 2008

¿Fue un sueño?


Al amanecer no había
más que secuelas intangibles
y ni una prueba
de que haya ocurrido.

No queda más que este
dolor encausado hacia tu nombre
impune,
desatado,
tiránico.

Tu nombre como una bala,
robándome la sangre y la vida,
dejándome sola, pensando
si de verdad fuiste mío
o sólo fue un sueño.

domingo, 13 de enero de 2008

Tuve


Tuve en las manos
la amplia victoria de tu felicidad,
la gran adicción de tus mentiras,
la cruel cobardía de tus caprichos,
la dulce locura de tus pasiones bajas,
el ahogo mortal de tu silencio,
la distancia astral de tu ausencia,
la muerte en vida de tu indiferencia,
el amargo abatimiento de tu abandono.


Tuve en mis brazos, hombre,
tu perfil más humano,
tu retrato más famoso,
tus defectos corporizados,
tus virtudes diminutas,
tu intimo super yo narcisista, indetenible,
indefendible,
inolvidable.

jueves, 13 de diciembre de 2007

Invisible

Carga de secretos ocultos
desangrándome y robándome,
una procesión de silencios espesos,
soledad de mutismo;
ay, verdad ven y rompe estas cadenas
que poco a poco me borran de la faz de la tierra
y me vuelven porque quieren
(porque quiero)
invisible.

domingo, 2 de diciembre de 2007

Amor


Amor, el velo de la decepción quiero sacarte,
quiero alejarte la estela del fracaso
y prenderte lo indoloro del paisaje
para que andes sin sentirte sola,
ponerte mi poesía como escudo
cuando las flechas de la realidad te apunten,
y darte las alas del realismo mágico
para que sobrevueles el mar del abandono.


Amor, que encuentres el amor buscado,
que siempre la felicidad te corresponda,
que mi abrazo te aleje los males
que suelen rondar a las buenas personas,
que ya nunca desees sacarte
con jabón la originalidad que te hace única
y yo pueda hacerme indestructible
y cubrirte de los dedos que señalan.


Amor, el tiempo sufrido te confisco
para que no te pese ni en recuerdos.

martes, 13 de noviembre de 2007

Duelen

Este error inexcusable,
este abandono,
este daño que nunca has reparado,
este resarcimiento demorado
que espero para liberar tus culpas,
esta mentira dolosa
y este engaño,
que vician tu amor de nulidad absoluta.

sábado, 3 de noviembre de 2007

Ilesa


Del quebranto momentáneo del amor primitivo
he resultado a tu pesar indemne,
del audaz cuchillazo de tu huida silenciosa
y del persistente recuerdo que se niega a desvanecerte.


He resultado de este sísmico encuentro
después de esta cuarentena de sordera y encierro,
ilesa, ante tu voz rasgada y tu cuerpo
lejano, una vez más, perjudicial y yerto.


He salido ilesa de ése huracán de dudas
de esa pasión apócrifa, enaltecida y ficticia,
ya no hay huellas, tan sólo un constante lamento
que rara vez manifiesta en mis poesías.

viernes, 19 de octubre de 2007

Corpus

Quiero despojarme de estas extremidades
pesadas y amplias,
colmadas de soledad e indiferencia;
quiero ser abstracta,
tan abstracta como el viento
que besa intensamente tu existencia;
quiero sustraerme y prescindir
de un torso, de un sexo, de un rostro,
no ser y ser a la vez,
estar pero no concretamente,
sin envases,
sin límites,
sin cuerpo.

domingo, 30 de septiembre de 2007

Divagación

Quiero acercarme a vos más de lo permitido
y aferrarme de manera poco convencional
a la balsa que simboliza tu cuerpo desnudo
en medio de este mar de angustia y misterio;
acercarme de forma victoriosa,
posarme un segundo en tu biografía
y ser de esos amores efímeros
que serán siempre perfectos y añorados,
quiero acercarme a vos aunque no intuyas,
ni en tu mejor interpretación, cuánto te quiero.

domingo, 2 de septiembre de 2007

Sin memoria


Tu amnesia definitiva he conocido
como un flamante enemigo que me ataca
y de tu alzheimer y tu egocentrismo,
Narciso, en mi cuerpo aun llevo las marcas,
de eternas mentiras que has elaborado,
de ésta gris espera de tejer sin lana
tu imagen sobre todas las texturas
que de mi inocencia se ríe a carcajadas.

sábado, 18 de agosto de 2007

Algo


Algo.
Como un millón de muertos en Darfur,
cadáveres ocultos bajo paladas de silencio,
arena árida de la sequía recorriendo los huesos,
la carne podrida.
Algo como un niño olcuto tras un papiro
y por sus venas corriéndole el SIDA,
como el apartheid en el siglo XXI,
y la maldita ONU tan distraída
que ignora los flagrantes genocidios,
el hambre atroz, las mil heridas
que no se borran del pueblo africano,
del último en todas las listas
del tan negro tercer mundo
donde antes convivían
faraones y pirámides de prosperidad.
Algo de esto ocurre mientras me miras,
inocente y bello,
algo tan completamente ajeno a nuestras vidas
y que a la vez me duele tan profundamente,
que tengo que decirlo en mi poesía.

domingo, 12 de agosto de 2007

Atrapada

Atrapada más allá
del recuerdo impúdico,
con las manos agarrando mis rodillas,
soltando mis lágrimas y odiando al viento
que me toca.

miércoles, 18 de julio de 2007

Amor en Buenos Aires

Te quedaste con el verso que era mío
Buenos Aires, de amor y de anarquía,
las luces me clavaste en la ceguera
y me llevaste a lugar dónde querías,
con la espada empuñada y sin escudo
Buenos Aires, de locura desmedida ,
libertino me enfrentaste a las ficciones
sin premeditación ni tiempo para curar heridas.

viernes, 6 de julio de 2007

Chau

Sin adioses,
ni torturas,
ni mentiras,
ni confesiones,
sin palabras,
ni abrazos,
ni cursis corazones,
ni fotos,
ni fechas,
ni calendarios;
con lágrimas por otra
y sin saber
ni presentir,
te dejé marchar,
sin gritarlo,
sin hundirme,
ni quebrarme,
ni olvidarte.

martes, 26 de junio de 2007

Ganas(te)

Hoy es uno de esos días en que a veces
me dan ganas de arrancarte la camisa
y perderme en el tumulto que seremos los dos juntos
con todos nuestros recuerdos y nuestras leyendas descolgadas.
Hoy me dan tantas ganas de tenerte
que pierdo el momento de estar conmigo y me voy
perdida entre los ladrillos y las flores que te encierran
para darte la libertad de mi hoguera como estallido de paz y espacio abierto.
Ay, que ganas de sacarte la camisa.

miércoles, 6 de junio de 2007

Nada

Nada hace que el sueño de anoche
(ese, de doradas intermitencias,
de roces, de exilios, de catastróficas señales)
sea el futuro próximo
que veo en tus ojos de amante libertino,
de guerrillero.
Ni mi peor temor
- ni ese recuerdo
que me produce un temblor enorme -
ocasiona el peligro inminente
de que acerques tu boca tanto...
tu cuerpo tanto...
tu beso tanto...

viernes, 1 de junio de 2007

Sin libreto

Sin libreto,
personaje del abstracto del deseo acumulado,
apareces en escena y luego
te retiras ileso del drama
en el que has transformado mi existencia.

martes, 22 de mayo de 2007

Argentina 2007

En este tiempo
de 1984 y concursadas,
de muertes de maestros,
de injusticia social y de elecciones;
yo sólo pienso:
poema, de dónde naces
quién es tu madre si aquí
tan sólo hay fracasos,
tan sólo melancolía en nuestras manos
y el hondo silencio
de los mártires ,
de los santos,
de los cadáveres que siembra el sistema...

¡Grita, poema, denuncia!
Que la censura en la primera plana
te mira envidiosa, y marcha atrás
comienza a perseguirnos.

miércoles, 16 de mayo de 2007

Tu ausencia

"¿En qué hondonada esconderé mi alma
para que no vea tu ausencia
que como un sol terrible, sin ocaso,
brilla definitiva y despiadada?
Tu ausencia me rodea
como la cuerda a la garganta,
el mar al que se hunde."
J.L.B


Sumó las excusas, las mentiras, las locuras, los abandonos, los años desperdiciados. Pensó que posiblemente era viable salvarlo y que también cabía el riesgo de una nueva frustración. Aun así no armó las valijas y corrió enceguecida detrás del primer intérprete de amante que se escapó del plano onírico y se apareció como salido de la lámpara de Aladino.
Nunca supo antes cuan terrible era la soledad hasta ese momento, porque siempre la había evitado, a excepción de una vez en que unas semanas de soledad le provocaron alergia en los tobillos. Había sido abandonada por él y sus desvaríos. Ahora eran otros los síntomas: un ancho ardor en el alma, hinchazón en los ojos, dolor de pensamientos, llanto matutino, vespertino y nocturno, falta de aire, temblores, ira, decepción, angustia, y una rara transparencia en el pecho que le dejaba el corazón a la intemperie. Poco sospechaba cómo era capas de doler el alma, cuan sentido podía ser el grito que le nacía en las entrañas para llegarle a él, en su lejanía de libertad, gozo y soledad.
Ella por el contrario sólo sabía de tristezas y odios, de amplios fracaso amontonados y polvorientos en la repisa. Deseaba que se hunda en un abismo, que una plaga invada su casa, que lo condene esa culpa que ella perfectamente conocía.
Sentía su mutismo clavándose como una daga y su retrato persiguiéndola todo el día, asimilando un espectro. Lo veía en el grotesco de las frivolidades, como un usurpador.
Lo había llamado y escrito extensas cartas, se había aparecido en sus sueños, a robarle un beso, pero aun así el la rechazaba y al amanecer su alma llegaba cansada y con sed, luego de recorrer las áridas y extensas distancias que el había extendido entre ellos.
Así, víctima de su inmadurez, sus caprichos, sus comparaciones, se quedaba quieta ante los celos absolutos y se reprimía en la imagen deforme que le mostraba el espejo, con el desgarro sangrando, con el amor saliéndose del cuerpo. Yendo a ningún lugar, exiliada, ansiosa; humedeciendo pañuelos interminables cuya punta parecía estar en la galera de un mago.
“Adiós soledad definitiva, vete lejos. No quiero conocerte” pensaba. Vio sus valijas vacías, sus manos urgentes, su reloj avanzando de manera inversamente proporcional a sus deseos de verlo. El blanquinegro paisaje permaneció intacto.
“Entonces esto era, entonces así se siente morir de amor.”